
Ayer el autobús paró en tu calle…y me invitaste a un café. Y a algo más.
Hoy no quiero que me busques en mi piso, hay demasiado de mi en él.
Y mañana... Mañana nuestras miradas se cruzarán…pero no hablaremos, al menos no con nuestras bocas…
Escapistas…funámbulos con un abismo de formas borrosas a nuestros pies. Allí abajo tal vez estemos tú y yo esperándonos con las sonrisas francas. Invítame a ese café entonces…
Hoy no quiero que me busques en mi piso, hay demasiado de mi en él.
Y mañana... Mañana nuestras miradas se cruzarán…pero no hablaremos, al menos no con nuestras bocas…
Escapistas…funámbulos con un abismo de formas borrosas a nuestros pies. Allí abajo tal vez estemos tú y yo esperándonos con las sonrisas francas. Invítame a ese café entonces…
Ilustración: The Escapist (Eric Fortune)
2 comentarios:
Un café que nos haga olvidar nuestra soledad.....
:)
(toda una declaración,precioso)
Sabes, me encanta este post. Existen esos momentos y son extremadamente poderosos
Publicar un comentario