miércoles, 24 de diciembre de 2008

Este...


Esteee...pues eso, felices fiestas!!

miércoles, 10 de diciembre de 2008

4,33 y la Cámara Anecóica

Un nuevo desafío de Pep y Granota me pone en marcha para escribir en el blog. La verdad, últimamente lo tengo bastante abandonado, pero poco a poco lo iré sacando adelante.

El tema que nos proponen este mes de diciembre es el silencio y los sumideros, juntos o por separado.

Mi trabajo y mis aficiones requieren del uso constante del oído. Siempre me pregunté si se podía alcanzar el silencio absoluto. La respuesta la encontré en La Cámara Anecóica.

Una Cámara Anecóica es una habitación aislada herméticamente del ruido exterior cuyas paredes, previamente preparadas, absorben todo tipo de vibraciones, provocando el silencio absoluto.



En los años 50, el increíble pianista y compositor John Cage, siempre con sonidos poblando su cabeza, quiso conocer el silencio de verdad por una vez en su vida. Para ello probó la cámara anecóica de la universidad de Harvard... ¿Creéis que lo consiguió?

Dentro de la cámara John Cage oyó dos sonidos continuadamente: uno grave y uno agudo. El ingeniero de la cámara le informó de que el sonido agudo era su sistema nervioso, y el sonido grave la circulación de la sangre. Su conclusión fue que el silencio no era una cuestión acústica sino una actitud personal.

John Cage compuso entonces su pieza más famosa: 4,33. En ella, el compositor se sentaba ante su piano y no lo tocaba durante 4 minutos y 33 segundos. Los únicos sonidos eran los del ambiente y los del público. Después se iba. La pieza había terminado.

Podréis imaginar que cada concierto era único.

"La música que prefiero, más que la mía, es la que escuchamos cuando estamos en silencio". (John Cage 1952)